El emprendimiento es un camino elegido cada vez por más personas en España. Puede ser muy satisfactorio y emocionante el dar vida a tu propia idea de negocio y ver cómo esta funciona y se hace realidad. No obstante, es un camino que también nos saca de nuestra zona de confort, enfrentándonos a un temor común: el fracaso.
Es natural sentir vértigo cuando comienzas a emprender y aventurarte en algo diferente lleno de incertidumbre. Sin embargo, no debemos confundirnos y es que sentir miedo no tiene por qué ser malo, es una emoción que nos ha permitido sobrevivir a lo largo de la historia. Lo negativo es cuando este miedo se apodera de ti, impidiéndote avanzar. Es decir, el problema reside en no tener la resiliencia y determinación suficiente como para superar el obstáculo que puede suponer este miedo al fracaso.
Este temor a que las cosas no te vayan como esperabas puede provocar una bajada en tu autoestima, que desemboca en una disminución de tu energía, produciendo bloqueos, desinterés y desmotivación, emociones nada favorables para el éxito de un proyecto emprendedor.
En La Lonja de la Innovación contamos con un equipo de mentores expertos en diversas áreas del emprendimiento que ayudan a nuestros emprendedores a apaciguar ese miedo que pueden sentir al aventurarse a hacer realidad su idea de negocio. Pero, para que tú también puedas controlarlo, en este post te traemos algunos consejos.
Superar el miedo al fracaso
Antes de nada es importante comprender que pensar en el fracaso no es malo. De hecho, puede llegar a ser positivo, pues implica realizar un análisis de todos los posibles escenarios que puede haber en el momento de emprender. Esto te permite organizar un plan completo y realista que haya valorado todos los posibles riesgos y errores que puedan conducir al fracaso y prevenirlos con mayor facilidad.
El miedo, en su justa medida, puede empujarte a conocer apoyos, muchas veces expertos, que aportan mejores ideas; fomenta el aprendizaje y la formación continua; puede ayudar al emprendedor a encontrar posibles defectos en su proyecto y encontrar más de los que podría haber encontrado. De esta forma, se puede actuar para mejorar.
El problema viene cuando este miedo nos frena y no permite avanzar. Es importante no sentirse intimidado ante este temor y poderle hacer frente para poder hacer realidad tu proyecto. Para que puedas lograrlo, te traemos algunas maneras de superarlo:
- Piensa en escenarios realistas y no tan pesimistas. Muchas veces, conducidos por el miedo, tendemos a valorar las situaciones de forma negativa y muy pesimista dejando el realismo a un lado. Evita caer en el pesimismo, no te sitúes en el peor escenario posible y visualiza escenarios realistas. Crear mundos lleno de posibilidades catastróficas solo va a provocar que pierdas la calma y estés continuamente preocupado, lo que te va a impedir avanzando. Cuando esto pase detente e intenta pensar en escenarios más realistas.
- Aprender de los errores. Todos los emprendedores, incluso los más famosos, han cometido errores a lo largo de su vida. Esto nos aporta lecciones valiosas de las que aprender. Ábrete a aprender de errores ajenos, utilizando su experiencia como conocimientos.
- Minimiza el nivel de incertidumbre de tu proyecto. El miedo al fracaso a la hora de emprender viene de la incertidumbre, de no saber si tu proyecto tendrá el éxito que esperabas o no. No podemos eliminar esta incertidumbre, pero sí podemos rebajarla a través de la validación de tu proyecto y de la elaboración de un MVP.
- Pide ayuda. Cuando lo necesites, habla con algún amigo, mentores, compañero o quien sea para que te dé su opinión y te ofrezca una perspectiva diferente. Además, si puedes encontrar ayuda de parte de alguien que haya pasado antes por una situación similar, será muy beneficioso para ti
- Ten una buena metodología de trabajo. Una forma de evitar el fracaso en la medida de lo posible es estar bien organizado con una buena metodología que te permita asegurar que cumplas con todo.
- Ponte metas alcanzables. En lugar de ponerte metas exageradas, ponte metas realistas y que puedas alcanzar, algunas de ellas, en el corto plazo. De esta forma, según vayas avanzando sentirás que estás teniendo éxito al ir alcanzando los pequeños objetivos que te habías propuesto, motivándote para seguir.
- Aprende de los errores. No pienses en los errores como sinónimo de fracaso o de final. Considéralos como aprendizajes y nuevos comienzos. Cada error es un nuevo aprendizaje, puedes decidir tirar la toalla y no seguir adelante o levantarte y seguir intentándolo. Analiza cada error que cometas de forma positiva, aprendiendo qué hiciste mal y qué puedes mejorar para la próxima vez, esto te permitirá mejorar tu startup y lograr más experiencia.
Ahora es el momento de dejar de lado esos miedos y lanzarte a la aventura de emprender sin temer a los posibles errores que se cometan por el camino.