¿Estás pensando en dar un paso más allá con tu startup y conquistar mercados internacionales? Esto es algo que ronda por la cabeza de casi todos los emprendedores llegados a cierto punto de su negocio. La internacionalización es una estrategia vital para el crecimiento y competitividad de tu startup. Puede llevar a generar más ingresos y mejorar tu reputación, pero una mala organización y precipitarse al tomar la decisión, solo puede traer malos resultados y pérdidas de capital y tiempo. Por ello, en este post te queremos contar un poco más sobre cómo llevar a cabo este difícil proceso y no fallar en el intento.
En La Lonja de la Innovación, conscientes de la dificultad de este proceso, contamos con un mentor especializado en la internacionalización, Alejandro Villarán, quien ayuda a las startups a planificar sus estrategias para triunfar al lanzarse a nuevos mercados. Y es que abrir un negocio en Huelva y que llegue a diferentes rincones del mundo es posible, así lo demuestra nuestra startup alumni Kemtecnia, quien ha abierto una delegación en la India.
Por qué internacionalizar
Si te estás preguntando si realmente vale la pena afrontar este complejo proceso, la respuesta es sí y aquí te contamos el porqué. Como anteriormente adelantamos, salir de tus fronteras y llegar a otros rincones del mundo hace a tu startup más competitiva, pero eso es solo la punta del iceberg, porque también puedes lograr:
- Aumento de la competitividad. Moverte en nuevos mercados significa moverse en zonas diferentes a las que estás acostumbrado. Esto va a obligarte a innovar y mejorar tus productos o servicios, impulsando la excelencia y fomentando la creatividad, mejorando así tu posición frente a la competencia.
- Acceso a nuevos clientes. Lógicamente, al acceder a nuevos mercados, tu startup tendrá la capacidad de aumentar su base de clientes potenciales y aumentar tus ingresos, reduciendo, además, la dependencia de actuar en un único mercado, lo que puede suponer ser un riesgo a largo plazo debido a las fluctuaciones del mercado y posibles crisis.
- Mejorar la imagen de marca. Al internacionalizar tu empresa estás demostrando confianza en la calidad de tus productos o servicios y que tienes capacidad para competir a nivel mundial, lo que trae consigo una mejora la reputación de tu marca a nivel global.
En definitiva, un proceso de internacionalización bien elaborado trae consigo mejoras en la competitividad, en los ingresos y en tu imagen de marca.
Consejos y pasos para el proceso de internacionalización
La internacionalización de tu startup puede traer grandes beneficios, pero hacerlo de forma incorrecta puede significar el fin de tu negocio. Es un proceso largo, que requiere tiempo, conocimientos y estrategias. A continuación te traemos unos consejos clave:
- Busca asesoramiento. Contar con apoyo y asesoramiento de expertos en este área, como los mentores de La Lonja de la Innovación, puede ser fundamental para lograrlo.
- Adáptate al mercado. Aprende el idioma, los valores, cultura y necesidades de los nuevos mercados en los que vas a actuar para poder adaptarte a ellos.
- Ten en cuenta las barreras no arancelarias. Los aranceles no son las únicas barreras, existen también las culturales, de pago, de transporte, normativas… Investígalas todas y ten en cuenta cómo superarlas.
- Coordínate con tu equipo. Es crucial que todo tu equipo esté al tanto y coordinado durante este proceso. Una comunicación clara y colaboración son dos factores fundamentales para que triunfe.
Por otro lado, para que puedas contar con una visión general de todo el proceso, te traemos una breve lista de los pasos que requiere este proceso para que puedas tener un punto de partida sobre el que empezar:
- Crea un departamento exclusivo para la internacionalización. Es recomendable que montes un equipo dedicado exclusivamente a este proceso.
- Análisis interno. Como con cualquier otro proceso y estrategia, hay que realizar un análisis de tu empresa exhaustivo antes de lanzarse. Es recomendable que hagas un DAFO para identificar todos los aspectos que pueden influir en tu internacionalización. Por otro lado, establece también los objetivos, que sean realistas y medibles.
- Estudia la situación financiera. También es fundamental conocer cómo se encuentra tu situación financiera antes de internacionalizar para poder determinar la viabilidad económica y establecer un presupuesto.
- Analiza los riesgos. Existen diversos riesgos asociados a la internacionalización. Entre ellos los riesgos del país de destino, los económicos, de tipo de cambios y normativos. Estudialos todos para poder estar preparado y anticiparse a ellos.
- Elige el mercado. Identifica los mercados y decide en cuál quieres entrar. Puedes optar por países estratégicos, que ofrecen oportunidades de crecimiento significativas; complementarios que se alinean con tu oferta actual, o explorar otras opciones.
- Elabora un plan de internacionalización. Con todo lo anterior, ha llegado el momento de diseñar tu estrategia, adaptándola a las características y necesidades del mercado objetivo y teniendo en cuenta la situación actual de tu empresa. En este paso no puedes olvidar adaptar tu producto o servicio a cada mercado, lo que implica ajustar su precio, calidad y cumplir con la normativa local.
- Ten la documentación necesaria. A la hora de exportar productos o servicios hay diferentes documentos que debes tener preparados, como certificados de origen, facturas comerciales, pro–formas, aduaneras y consulares.
Ahora que ya tienes una visión general del proceso de internacionalización, si crees que ha llegado el momento para tu startup y quieres mejorar tus resultados, es hora de ponerse en marcha.